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jueves, 18 de abril de 2013

HIJOS DE LA GRAN BRETAÑA



La prensa británica sigue laborando contra España       
 
Como si estuvieran a sueldo de la Generalidad de Cataluña, algunos periodistas británicos no cejan en su obsesión de arremeter contra España con cualquier excusa. Si hace unos días era la sobrevalorada cadena televisiva BBC la que aparecía en el canal autonómico catalán TV3 con un demoledor e injusto reportaje sobre nuestro país, ahora ha sido el diario The Times el que se ha encargado de hurgar en la llaga del separatismo catalán.

El periodista de este rotativo Matthew Parris, afincado en Cataluña, ha señalado en su artículo publicado este sábado que "Cataluña es una bomba de relojería más grande que Chipre". El autor lo explica diciendo que "una secesión desordenada devastaría económicamente toda la Península Ibérica, desde Portugal hasta el País Vasco".

El periodista, que tiene casa en Tavertet (Barcelona), ha explicado en TV3 –¡cómo no!– que en uno de sus viajes por todo lo largo y ancho de este mundo, en concreto a la Cataluña profunda, ha visto que "en casi todas las casas ondea la bandera del separatismo catalán: una bandera al estilo de la cubana con una estrella dentro de un triángulo y las cuatro barras tradicionales catalanas”. ¡Gran descubrimiento, el del periodista británico!, que añade que tal visión ha obrado un efecto mágico, espectacular en su familia, convirtiéndola en nacionalista catalana.

Para Harris, "Madrid está jugando un punto difícil" –como en el tenis– y, al igual que Londres ha aceptado que Escocia haga un referéndum de autodeterminación, ha instado al Ejecutivo de Mariano Rajoy a que haga lo propio con Cataluña para "salir de este punto muerto". También a "respetar los resultados", una vez sea efectiva la consulta a la ciudadanía catalana.

Resulta muy sorprendente la afición de la Gran Bretaña por los asuntos de España y su afán histórico por inmiscuirse en ellos, cuando los españoles demostramos tan poco interés por los del Reino ‘Des-Unido’, excepto, quizá, por el teatro isabelino de Shakespeare y por el whisky escocés, que es posible que muy pronto deje de pertenecer a la Corona de su Graciosa Majestad.

Fuente:
Dialogolibre.com

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