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sábado, 9 de marzo de 2013

LA VOIX DES INNOCENTS




La voz de los inocentes
Se llama Jesús Poveda y su pacto con los no nacidos comenzó hace veintitantos años, siendo estudiante de Medicina. Durante unas prácticas de ginecología, tras un legrado, y ante el cadáver de un feto resultado de un aborto involuntario, se le escapó: "¡Que alguien haga algo!". Pero allí no había nadie, así que le tocó fundar Jóvenes Pro Vida. "Quien no aporta soluciones forma parte del problema". Ésa es su divisa.

Su militancia ciudadana le ha llevado alguna vez al calabozo. Todo por organizar sentadas frente a chiringuitos maltusistas y herodianos. Y por desafiar los argumentos antropológicos de la Policía: "No me toques los cojones". "Eso es lo que a ti te gustaría". Es decirlo, y dar con sus huesos en el furgón, donde nadie le busca las cosquillas, pues su pinta de forajido hace que se confunda fácilmente con la flora y fauna que habita las lecheras de la Policía. Sus frecuentes visitas a la Comisaría de Tetuán le han granjeado la amistad del comisario, tipo duro aficionado a las películas de cine negro de la serie B, cuentan.

A pesar de que la causa que defiende parece más perdida que nunca, Poveda conserva intacto el sentido del humor. Una vez le pusieron una multa y le pareció tan poco que preguntó: "Y si pago el doble, ¿lo puedo volver a hacer?". La juez se partía de risa. 

En otra ocasión, y ante la monería progre de Gallardón de borrar el rastro religioso de la Navidad, montó un Belén viviente en la Puerta de Alcalá. Le acompañaron Rafa Lozano (su alter ego e interesante fronterizo también), Quique Losana (promotor de la idea) y dos docenas más. Esta vez la Policía no tuvo razones antropológicas para detenerlos. A ver quién le decía al comisario que traían esposados a San José, la Virgen, el Niño y los Pastores. 

Y por si no convencen estas notas, me cuentan que Poveda imparte cursos antiestrés para funcionarios. ¿Basta para definir su fenomenal humor?

En su agenda –si tiene, que lo dudo– está hacerse con un escaño en el Parlamento Europeo para ser la voz de los sin voz y meter algo de ruido a ese cementerio de elefantes con sede alterna en Bruselas y Estrasburgo. ¿Cómo? Encabezando dentro de tres años la candidatura Europa por la Vida.

Mientras –y durante, y después– seguirá rescatando bebés del cubo de basura. Y convenciendo a comodones de sofá como yo de que es justo, necesario y saludable rendir luto y homenaje a las víctimas del aborto. 

http://www.fluvium.org/textos/aborto/abo118.htm

"Cuando el gobierno ve a un ecologista jugarse la vida por un huevo de halcón, ve en él un héroe, y cuando ve a un pro-vida en la puerta de una clínica abortista, ve en él a un fanático".  
                  Jesús Poveda

viernes, 8 de marzo de 2013

LAS COSAS DE PALACIO




Lo que no te dicen del rey...

El caso Urdangarín y el caso Corina han llegado en el peor momento de la monarquía y contribuyen a acentuar la crisis institucional de nuestro país. No solamente un país camino de los 6.000.000 de parados no puede permitirse el ver como la rapacidad y la depredación están instalados en las altas instancias del Estado, sino que la crisis de la monarquía llega en el momento en el que las últimas cinco operaciones realizadas en Juan Carlos I y su visible y creciente deterioro físico, nos indican a las claras que estamos, sino ante una abdicación al estilo del de Benedicto XVI, sí ante una sucesión inevitable.

Y este es el problema, porque si en 1975, Juan Carlos se beneficiaba de una situación en la que la derecha franquista estaba dispuesta a defender a capa y espada la monarquía, aunque solamente fuera para que la oposición democrática no se llevara el gato al agua de la “ruptura democrática”, ahora, no hay fuerzas sociales lo suficientemente fuertes como salvaguardar la permanencia de la institución monárquica, sino que tampoco existen fuerzas políticas con suficiente convicción y compromiso para asumir esa defensa de manera ni remotamente numantina. Ni siquiera las fuerzas armadas parecen muy dispuestas a decir nada al respecto.

Por mucho que los medios de comunicación alardeen del papel del rey durante la transición, la triste realidad, es que Juan Carlos I se vio siempre, más bien arrastrado por los acontecimientos, que controlándolos. Lo único que hizo fue lo que exigía su interés en permanecer en el cargo.

En este sentido puede decirse que Juan Carlos I es digno hijo de su padre, Don Juan de Borbón, un personaje sobre el que cuando falleció, los editoriales encontraron serias dificultades en encontrar motivos para loar su figura. En efecto, nada, absolutamente nada, había hecho por España en su larga vida. Los dos manifiestos que publicó durante el franquismo se debieron a la pluma de su Consejo Asesor, especialmente de Pemán. Aprovechado, interesado, gorrón, y “borracho” (en Londres conocí a uno de sus amigos íntimos, un griego que al enterarse de que yo era español y de Barcelona simplemente me dijo “Yo muy amigo de Don Juan...” y, por todo mérito, añadió “¡… es un borracho!”. Y es que esa rama borbónica no ha dado para más.

Parece difícil que Felipe, el hijo de Juan Carlos, pueda remontar la herencia genética de esa rama y habría que esperar a ver si la aportación biológica aportada por Letizia consigue superar la “mala calidad” de estos borbones demostrada ya desde un Carlos IV allá por el siglo XVIII.

Pero, claro, este país ya no está para esperanzas, ni para experimentos que no puedan desarrollarse aquí y ahora. Por lo demás, las operaciones de cirugía estética de Leticia, su figura patéticamente anoréxica y su historia pasada, tampoco son como para echar cohetes. Por otra parte, el que haya “apoyado” a una desahuciada recientemente, lo único que indica, no es su “sentido social”, sino el que sus asesores están intentando mejorar su imagen a la vista de la proximidad de la sucesión.

Pero todo lo que pueda hacer la pareja Felipe-Letizia, la realidad es que la hora de la monarquía ya ha pasado. El caso Urdangarin y las miserias que ha sacado a la superficie (y que sacará en las próximas semanas en su despecho) el Caso Corina, ha sido la puntilla para la monarquía “constitucional”. Desde los años 80 se sabía que TODOS los casos de “gran corrupción” en España estaban siendo protagonizados por “amigos íntimos” del Rey: desde Ruiz Mateos, a Prado y Colón de Carvajal, desde Javier de la Rosa hasta Mario Conde. 

Todos han sido amigos del rey y todos han operado a sus anchas, todos han entregado fondos y facilitado negocios a la Casa Real creyendo que a la hora de la verdad, el rey saldría en su defensa… pero, cuando esa fatídica hora llegó, un comunicado de la Casa Real, siempre, cortó cualquier relación y el rey se inhibió de sus amigos… Lo mismo, en definitiva que ha ocurrido en estos dos últimos casos (Urdangarín y Corina), solo que en estas ocasiones, la proximidad a la Casa Real es tal que nadie, absolutamente nadie, puede creer que Juan Carlos I no sabía nada de las rapacerías realizadas en su entorno íntimo.

Esto, sin olvidar que Juan Carlos I no ha sido nunca un dechado de virtudes cívicas ni familiares. El hecho de que ahora se haya realizado una sexta operación alegando que Juan Carlos era un “gran deportista” (si alguien que es un “gran deportista” llega a la ancianidad hecho literalmente polvo, tal parece el mejor indicativo para negarse a practicar cualquier deporte…), es casi un chiste. Es alguien que ha abusado de sus fuerzas hasta no hace mucho y no precisamente en deportes, a menos que consideremos, claro está como deportes olímpicos los de cama y el levantamiento del vaso sustituya al de las pesas… Los amoríos del rey se conocen hasta la saciedad y los ha realizado sin el más mínimo pudor, indicando a la sociedad el camino para el ejercicio de la cornamenta.

Pero hay algo mucho peor. Durante años, el plotter de la Casa Real ha ido firmando leyes que el rey tenía que haber leído y valorado. Pero eso, a él, nunca le ha preocupado lo más mínimo. Nos decían que el Rey estaba por encima de los partidos, en tanto que representante de TODOS los españoles. Pero no lo ha sido: ha sido un apolítico más, en un país de apolíticos y apáticos, preocupado por juergas, vacaciones, regalos, negocios hechos al calor de la corona, comisiones, francachelas y putones, en ocasiones de la más baja estofa. 

Y el rey debería de haber dado ejemplo. Si no lo ha dado ¿para qué diablos sirve? Se tenía que haber preocupado de lo que firmaba y tenía que haber opinado sobre “lo bueno” y sobre “lo malo”, pero ha confundido el “estar por encima de las opciones” con el “pasar de todo”.

Ahora todo eso se termina. Estamos en la última parte de la agonía del régimen monárquico. La crisis de la monarquía, ni siquiera tiene entidad propia, es solamente una parte de la crisis política que ha puesto de manifiesto la persistencia de la crisis económica desde hace ya un lustro. 

No veo a Urgandarín en la cárcel, no veo a la infanta imputada, pero tampoco veo al tándem Felipe-Leticia reinando. La irrelevancia de la monarquía es tal que hoy su nombre se vincula a casos de corrupción, a la prensa del corazón y a la entrega de premios deportivos. Por lo demás, si desapareciera Juan Carlos y toda la familia real, abducida por una nave extraterrestre, ni siquiera nos enteraríamos.

No es un drama que no haya “jefe del Estado”. Con un “presidente de gobierno” que fuera verdaderamente un ESTADISTA y no un gestor temporal y mediocre de la cosa pública, bastaría. Pero la actual clase política no da para mucho, ni siquiera para eso y no pueden pedirse peras al olmo, ni hay piedra filosofal que capaz de transformar la mierda seca y bien aplanada en oro resplandeciente.

Nuestro drama histórico en el momento presente es que tenemos un sistema incapaz de evolucionar, pero que precisa evolucionar para solucionar los problemas del país. Ni gran coalición (en la práctica ya existe un “PPSOE”), ni gobierno del centro-derecha, ni del centro-izquierda, son viables, ni un pronunciamiento del estamento de los “muditos” (el ejército), tienen visos de verosimilitud. No hay, digámoslo ya, forma de acabar con la crisis política, mientras que la crisis económica se prolongará durante décadas como un mal crónico que acompañará a nuestra sociedad.
                                                                                     Ernesto Milá

jueves, 7 de marzo de 2013

UN REBELDE CON CAUSA




 Dionisio Ridruejo. La forja de un Demócrata

UMBRAL DE LA MADUREZ
        
Pero ahora recuerda, solamente recuerda.
Sea tu compasión sin llanto y sin reproche,
y sea, sobre todo, sin magisterio vano.
No clames tu experiencia.
Es tiempo de silencio y destreza piadosa.
Sobre todo no quieras escarmentar ahora
al que viene detrás y va por su camino.

¡Oh!, no enseñes al joven;
no le digas mostrando tu pequeña impotencia:
«Mirad, jóvenes, ésta, la verdad de la vida.»
Que no sepan por ti... Pero no sabrán nada;
sus ojos no te ven, sus oídos no escuchan.
Míralos como llegan aureolados, puros:
aquel que se dispone como tú en otro tiempo
a vestir castamente la armadura,
y aquel que viene envuelto
en un manto de nieblas melancólicas, chispeando sus ojos,
y aquel que se ha vestido las mallas delicadas del placer sin cautela.
Ellos sabrán por sí y a costa de su sangre.
Que transiten sin huella su pavimento de diamante virgen,
que impongan el esquife de oro a las ondas bravías,
que no emplome sus alas la prudencia ni el desengaño.
No ahorres dolor al que aún es omnipotente.
Tú sigue tu camino, construyendo,
hora a hora, brote a brote, grano a grano, alma a alma,
el penoso edificio de tus realidades.
Cree, espera y recuerda,
recuerda solamente, porque el recuerdo es claro,
y como piedra oculta va haciéndote en un ser indestructible.
Y si has de llorar vertiendo las cenizas de tu sangre
sobre las cenizas del empeño maltrecho y remoto
busca la soledad y ríndete en silencio.
Clama a tu corazón de rodillas: ¡Dios mío!
                       

                                                                     Dionisio Ridruejo

                                                                        


                                                                               

miércoles, 6 de marzo de 2013

AVE HUGO CHÁVEZ




Fallece el líder de la Revolución Bolivariana de Venezuela, comandante Hugo Chávez       
 
El presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías, falleció en Caracas a causa del cáncer que estaba combatiendo desde hace más de un año y medio, según informó el vicepresidente Nicolás Maduro.

El presidente Chávez, según anunció Nicolás Maduro, falleció a las 16:45 (hora local) en el Hospital Militar cuando los miembros del Gobierno estaban esperando el último parte médico. La Fuerza Nacional Bolivariana se ha desplegado por todo el país.

Hugo Chávez, de 58 años, que el pasado mes de octubre fue reelegido para gobernar el país hasta 2019, murió dos meses y medio después de someterse a su cuarta intervención quirúrgica por la reaparición del tumor canceroso que le fue diagnosticado a mediados del 2011 en la zona pélvica.

Maduro señaló además que se ha previsto un despliegue especial de toda la Fuerza Armada y de la Policía Nacional quien en este mismo momento se encuentra desplegándose para acompañar a nuestro pueblo y garantizar la paz.

“El respeto y la paz tienen que ir de la mano (…) Nosotros llamamos a todos los compatriotas a ser los vigilantes de la paz, del respeto y nosotros asumimos comandante Hugo Chávez, sus rezos, su proyecto”, dijo el vicepresidente.

En relación a las complicaciones del estado de salud del mandatario venezolano, el ministro de Información, Ernesto Villegas, anunció a inicios de enero que Hugo Chávez, presenta insuficiencia respiratoria derivada de "una severa infección pulmonar" sobrevenida durante el proceso posoperatorio.

Antes de la intervención, Chávez indicó que Nicolás Maduro debería concluir el período presidencial en caso de que se presentara alguna circunstancia que lo inhabilitara a él, lo cual despertó las sospechas de que la salud del presidente podría estar empeorando.

Un líder revolucionario

Con su lema de Pueblo, Caudillo y Ejército, el comandante Hugo Chávez Frías consiguió el apoyo de las masas para partir el espinazo de los partidos políticos tradicionales y aplastar a los oligarcas. Era el año 1998 y anunciaba el renacimiento de Venezuela. El fallecido presidente dispuso de las herramientas fundamentales para abordar la encarnación de todo caudillo: un carisma imbatible y muchos pobres a los que dio esperanza.

El paladín de la boina colorada murió vencido por un tumor y suplicando al Dios más vida para consolidar la revolución ideológica comenzada hace catorce años sobre las cenizas del bipartidismo nacional (1958-1999): Acción Democrática, socialdemócrata, y COPEI, democristiano: “Dios no me lleves todavía. Me queda mucho por hacer por este pueblo”, imploró en abril, con un rosario colgado al cuello.

Sintonizando con su carácter castrense, el teniente coronel de paracaidistas hizo lo que parecía imposible en una América patio trasero de los norteamericanos.

Ganó elecciones una tras otra, gracias entre otras muchas cosas, a apoyarse en la población más pobre, fundamentalmente negra y mulata. Campechano, seductor, autoritario, nadie consiguió nunca tanta veneración entre las clases más necesitadas de una nación de 29 millones de habitantes acostumbrada al subsidio y a la corrupción de la oligarquía de los Cisneros, los Andrés Pérez y demás amigos de la casta política corrupta española.

Ha muerto idolatrado por los suyos, con todos los resortes del Estado bajo su mando, y los índices de pobreza a la baja porque la inversión social en el último decenio alcanzó los 400.000 millones de dólares, según la CEPAL. Las mayorías oficialistas le permitieron burlar los contrapesos propios de las democracias representativas y legislar sin trabas, pero no fue un dictador porque todos sus actos de gobierno fueron legales, bien porque los legalizó a posteriori, o bien porque antes había promulgado las leyes que los justificaban.

Pocos negaron a Chávez una sincera empatía con los marginados, mayoritariamente de origen africano, que abrazaron la causa bolivariana con la gratitud y fidelidad de quienes se sintieron vindicados frente a la tradicional supremacía del poder criollo. Fue un jefe brillante, imprevisible, contradictorio, construido para la confrontación.

“Dame tu corona Cristo, dámela, que yo sangro. Dame tu cruz, cien cruces, que yo las llevo, pero dame vida”, rezó ante la imagen del Nazareno coronado de espinas. Descanse en Paz.

 Es la hora del pueblo y el Ejército de Venezuela.
 

            "Dulce et decorum est pro patria mori"


martes, 5 de marzo de 2013

LA LISTA FALCIANI DE 1959




Franco ya publicó en 1959 su lista Falciani, llena de 'pujoles', 'trías' y demás nombres ilustres

Algunos llevan los escándalos económicos en los genes, o eso se deduce al ver un Boletín Oficial del Estado que no tiene desperdicio.

Franco ya publicó en 1959 su propia lista estilo Falciani, en la que revelaba los nombres de evasores fiscales a Suiza y las consiguientes multas que les aplicaba. Y si aún no había sanción, informaba del estado en que se encontraba el sujeto.

Puede verse en el BOE del 9 de marzo de 1959. Hace casi 54 años ya.

El documento (al que adjuntamos un link y también puede ser descargado ), informa de la resolución del Consejo de Ministros en la que se hace pública la lista de evasores intervenida a la Societé de la Banque Suisse. El listado contiene 872 personas, que son súbditos extranjeros con nacionalidad comprobada, personas objeto de diligencias, personas sancionadas…

Merece la pena dedicar un rato al documento y ver tanto los nombres como las multas. Y por destacar algunos, adelantamos los de: “D. Florencio Pujol Brugat”, (número 136, apartado B), padre del ilustrísimo presidente de la Generalitat, abuelo del político convergente Oriol Pujol Ferrusola y fundador de la Banca Catalana que, por cierto, ¡fue creada también en marzo de 1959!; varios Trías Bertrán (109, apartado B, 132 apartado B, 37 apartado C), familiares del no menos ilustre abogado, Jorge Trías Sagnier, que ha incendiado el caso Bárcenas.

La lista no tiene desperdicio. Aparecen múltiples apellidos de alto copete de la burguesía y/o nobleza catalana, como Trías de Bes, Samaranch, Garriga-Nogués, Mas-Sardá, De la Rosa…, así como otros que no podían faltar: Botín (¿alguien lo dudaba?), Sáenz de Montagut, Ybarra, Gortázar, Oriol…

Algunos ya han desaparecido de los primeros puestos de mando del país, otros no. A lo mejor, algunos VIP de ahora pueden decir que esos que salían en el 59 con el mismo nombre no tienen nada que ver con ellos.

¿Genética?

Está claro que ahora mismo tenemos mucha gente deplorable omnipresente en nuestra actualidad de cada día. Estamos hartos de tanto personaje de tan distinguido pelaje y desesperanzados frente a la impunidad practicada por el Estado y la Justicia, popularmente, no tenemos dudas de que se van a ir de rositas, porque no se podrá demostrar casi nada sobre ellos. Pero, en descarga de algunos, se podría decir que son un poco hijos de los tiempos recientes; de avaricia y corrupción.

“De casta le viene al galgo”

Sin embargo, hay otros que parecen llevarlo en los genes y en la sangre familiar, ¿no? Ahí están sus antecesores saliendo en papeles vergonzantes. De casta la viene al galgo a algunas familias.

Por cierto, viendo esa lista tan larga de evasores catalanes, ¿cuántos hay que luego han sido estandartes del celebérrimo ‘Madrid nos roba’? Quizá, sólo quizá, el Gobierno les apriete ahora, pero antes bien que se lo llevaban ellos.
En estos tiempos de amnistías fiscales…

Ahí estaba, pues, el ‘tío Paco’, publicando listas a lo Falciani. Menudo era. ¿En estos tiempos de amnistías fiscales, resulta que el Caudillo daba caña a los evasores? A ver si vamos a tener que añorar sus prácticas, sobre todo ahora que resulta que, al parecer, el propio Falciani no es un divino loco altruista, sino que quiso comerciar con su lista del HSBC antes de enviarla a la agencia tributaria de Francia.

En cualquier caso, una sugerencia para Montoro: a los que se han acogido a la amnistía, que se les corte el pelo al cero y se les haga beber un litro de aceite de ricino, como se hacía antaño con los estraperlistas.

 http://vozpopuli.com/buscon/21552-franco-ya-publico-en-1959-su-lista-falciani-llena-de-pujoles-trias-y-demas-nombres-ilustres

lunes, 4 de marzo de 2013

INTERREGNUM




Los servicios de inteligencia de Francia temen "sucesos importantes" en España

La escalada de la tensión en que ha desembocado la actividad política en España en el transcurso de las últimas semanas, ha puesto en tensión a los servicios secretos franceses en España. Las fuentes principales de la "información subjetiva" se centran en determinados sectores empresariales, que han "retirado" o "desplazado" sus inversiones en nuestro país. Entre estos sectores empresariales hay tanto empresas españolas como extranjeras, y por parte de la inteligencia francesa se teme, según ha podido saber este medio, una "involución" que desemboque en algún tipo de suceso "importante". Entre el "estado de grave situación" en que se encuentran algunos estamentos del Estado sitúan al propio Gobierno y a la Casa Real.

Entre los "sucesos importantes", según ha podido conocer Elmundofinanciero.com de fuentes directas, se esperan "cambios políticos profundos", de acuerdo con un "cable" que los servicios de inteligencia franceses habrían enviado a París en el transcurso de la última semana.
 
Según este "cable", en una primera fase de estos "cambios" vaticinados por la información, estarían cambios "profundos" en el Gobierno, aunque la crisis no se zanjaría con estos cambios que podrían ser propiciados desde Moncloa, sino que se extenderían como un "cáncer" por el Congreso de los Diputados, con "vacíos de poder". Una segunda fase extendería estos "vacíos de poder" en algunos ministerios. 

El temor en el informe se centra en el estado real de vacío en que quedarían ministerios o servicios como Defensa o Interior, así como el "grado de afección" que padecerían instituciones del estado como la judicatura. 

Según el cable cifrado de los servicios secretos franceses, una "tercera" fase de esta involución conduciría a algunas instituciones a "situaciones límite". La desafección ciudadana y el papel de los medios de comunicación aparece también en el cable cifrado.

domingo, 3 de marzo de 2013

LA GENERACIÓN PERDIDA




La generación mejor preparada de España

De un tiempo a esta parte alardeamos de tener en España la generación más y mejor preparada de toda nuestra historia. En cantidad parece indiscutible. Respecto a la calidad, en cambio...
Pero supongamos que aceptamos el gran eslogan político de “la generación mejor preparada”. Así, reconocemos que nos encontramos con el mayor número de universitarios que jamás hayamos tenido en España y respecto al nivel académico, con la mayor especialización. Es decir, que hay muchos que saben mucho de lo suyo, pero… ¿cuánto saben de otras materias? La pregunta no es menor. Porque si consideramos que poseer formación superior exige, además de dominar la especialidad, poseer conocimientos de las menospreciadas Humanidades, el eslogan se nos cae a pedazos.
A un hombre o a una mujer que se le otorga el calificativo de “preparado” se le supone, y así se da a entender implícitamente en el eslogan, una formación que va más allá de los conocimientos estrictamente propios de su profesión. Y que contribuyen en gran medida a constituirlo en un ser con criterio propio y con capacidad para razonar con libertad.Esta última condición, que se reconoce como un logro de nuestra era, en realidad escasea por obra de una maquiavélica ingeniería social que sí constituye el gran denominador de nuestra época por encima incluso de la revolución tecnológica, y que ha logrado convencer de que se es libre, cuando se es rebaño.
Una buena formación en Humanidades ayuda y mucho a incentivar el libre pensamiento. Tal vez por esta razón se le negó a las masas un bachillerato humanista. La nobleza, el honor, la honradez y la conciencia dependen de otros muchos factores, pero una buena formación, que por supuesto no puede ser dogmática ni adoctrinadora, contribuye a fomentar esos valores que percibimos cada día más ausentes.
Pero adónde pretendo llegar con este artículo es a algo más radical y trascendente.  

¿De qué nos sirve la formación si no somos capaces de cambiar lo que ocurre? ¿De qué nos sirve la formación si carecemos de la tensión espiritual que nos proporcione el impulso necesario para emprender la regeneración?
Si admitimos que el espíritu de un hombre determina su vida y que el espíritu de una nación determina su destino, deberemos concluir que nuestro espíritu está en horas realmente bajas y que, sin él, por mucha formación que atesoremos jamás alcanzaremos el paraíso al que pretendemos llegar desde la mente.
Si decidimos soñar con el resurgir debemos aceptar que nuestro espíritu está en coma. Y para despertar, además de hacer un examen de conciencia individual y colectiva y generar un inicio por nosotros mismos, vamos a necesitar ayuda, no de alguien, sino de las circunstancias, para que nos brinden la oportunidad. De lo contrario, el peso de nuestras cadenas nos seguirá hundiendo a pesar de la generación mejor formada de España.      
                  http://www.elmanifiesto.com/articulos.asp?idarticulo=4267

 El 63% de los jóvenes hasta 24 años se encuentran buscando su primer empleo o son parados de larga duración.